14.1.07

Unidad


Ya que España es el material que compone este Blog, el título de esta entrada ha de considerarse provocador. Uno cree adivinar que, en medio de la tormenta, la formación de algún tipo de unidad debería ser catalizada por las iniciativas ciudadanas; no esperemos a los partidos. Parece que es la hora de rearmar la flotilla ciudadana por la libertad y contra el terrorismo (Basta Ya, Foro de Ermua, Fundación para la Libertad, AVT..) para que salga a la mar navegando unida contra el enemigo de todos. Traigo aquí tres textos de ciudadanos que pueden ayudarnos capear el temporal.


UNA EXPLICACIÓN:

Divide et impera
(Julio César)


Divide”, de los latinos,
es riesgo que nos espera.
¿Un César con desatinos
da al bárbaro el “et impera”?

"Por mucho que nos duela a los constitucionalistas, sí, a nosotros, PSOE y PP están condenados a no entenderse en materia antiterrorista. ¿Por qué? La culpa la tiene un pequeño detalle llamado elecciones. En efecto, el PSOE no puede abandonar del todo su estrategia anti-terrorista porque equivaldría a reconocer que estaba equivocada, lo que terminaría de hundirle en las urnas porque le enajenaría a los más suyos después de que el atentado le haya enajenado a los tibios. Por lo tanto, se ve obligado a mantener lo que pueda aunque para ello tenga que haber un poli malo, Rubalcaba, que niegue cualquier posibilidad de encuentro con ETA por lo menos en lo inmediato, y un ángel Zapatero que maree la perdiz mientras practica las reservas mentales. El PP, por su parte, no va a ceder un ápice en su estrategia contra ETA porque le está dando buenos réditos, basta con ver los sondeos. PSOE y PP se ven obligados, por consiguiente, a poner por delante lo que les separa en detrimento de lo que les une para pasmo de quienes estamos conminados a votarles (¿quién votará a Llamazares?) y alegría de una ETA que puede sacar más oxígeno del enfrentamiento que de la unión."

( Delmonico , en la página de bastaya)


UN AVISO:

Que el daño sea el menor,
aunque no exista consenso,
esta España del Señor
navegará en clima tenso.

CALLES

Jon Juaristi, ABC 14-01-07

"QUIZÁ sea el momento de ir pensando en desmovilizar al personal y dejar la calle para el que se la pasee, porque estamos llegando a niveles de alarma. Mayo queda demasiado lejos y hay que extremar la prudencia. Se impone un pacto de mínimos, un pacto entre caballeros. El Gobierno y la oposición deberían comprometerse desde ahora a desalentar las manifestaciones y acotar su enfrentamiento en los ámbitos parlamentarios, no vayamos a tener un disgusto........

...Atravesamos una crisis política muy grave. La más grave de la democracia nacida en 1978. Con todo, el atentado de ETA no ha hecho sino poner de manifiesto en toda su crudeza lo que todos sabíamos que ya se había producido mucho antes: una ruptura de los consensos básicos. Hay que evitar que la calle sirva de escenario a la disensión, porque las consecuencias terminarían por escapar a todo control. En otras circunstancias, adelantar las elecciones podría haber sido una solución; ahora, no tenemos ni esa certidumbre, porque el sistema está seriamente dañado...."



UNA VÍA DE SOLUCIÓN: SIN LIBERTAD, NADA DE NADA

Política en libertad
con la mafia no es posible.
No aceptar esta verdad
debería ser punible.

Y así lo denunciaba Fernando Savater en el último artículo publicado en El País. Rosa Díaz copiaba también estas palabras en su blog:

"Sí, hay que hacer algo, claro que hay que hacer algo. Por supuesto, recuperar el Pacto Antiterrorista, sobre todo en su preámbulo que condenaba el nacionalismo obligatorio estilo Lizarra (luego “plan Ibarretxe”) como precio al cese del terror. Pero es hora de ir decididamente más allá. Del famoso “proceso” queda en pie una frase que Zapatero repitió varias veces: primero el final de la violencia, luego la política. A lo largo de todos estos años hemos intentado hacer política en el País Vasco a pesar de la violencia y de su permanente adulteración de la voluntad ciudadana intimidada. Pero puedo que el Presidente tenga razón y que debamos tomar su fórmula al pie de la letra. Es hora de que los constitucionalistas nos neguemos a participar en el juego político mientras dure el terrorismo. No más elecciones, no más fingimiento de que se puede ser normal en plena anormalidad y de que quienes sacan ventaja de la situación la padecen tanto como sus víctimas directas. La autonomía no puede beneficiar sólo a unos, no es un derecho divino sin contrapartidas ni obligaciones con el Estado. Ya que tanto se invoca el caso irlandés en otras ocasiones, podemos recordar que Blair no ha vacilado en suspender la autonomía mientras no se daban las condiciones políticas y la aceptación de la legalidad necesarias para la convivencia. La pervivencia del terrorismo y de quienes no lo condenan (o lo apoyan) y lo rentabilizan crea una situación excepcional que es preciso encarar con medios políticos excepcionales si queremos alguna vez romper el círculo diabólico en el que estamos metidos. Me parece que todos los ciudadanos que no esperan ventajas directas o indirectas de la coacción etarra o de la subasta política de su liquidación condicional pueden comprender, aceptar y apoyar estas medidas clarificadoras."

11.1.07

Se resuelve el misterio Savater


En mayo de 2005 escribíamos aquí una entrada con el título "Savater ¿Un nuevo Garzón?" , en la que se especulaba acerca de las posibles razones para que el filósofo hubiese entrado, aunque fuese con todas las cautelas, en el juego de Zapatero (a la manera en que el juez fue abducido en su día por Felipe González). Ya está despejada la incógnita. En El País de hoy queda clara la razón: simplemente fue engañado. Empezamos a comprobar que la reacción del estafado Don Fernando puede ahora ser tan letal para este Presidente como lo fue la de Garzón para González.

8.1.07

Sin control de riesgos


Después de la gran noticia hay avidez de comentarios que difuminen las tinieblas en las que el terrorismo ha instalado a la política española. Es la hora de los blogs, y uno esencial es el de Rosa Díez. Su último comentario , colgado en internet hace una o dos horas, traerá cola, pues su clarividencia (la de quien conoce bien el percal de sus compañeros socialistas dialogadores) disipa muchas de las tinieblas. Rosa Díez tiene claro que la estrategia futura del Gobierno no es la de la enmienda sino la de distraernos con coartadas que le salven la cara, y acertadamente señala el peligro de un Presidente dispuesto a asumir todos los riesgos.